'El Loco' Gatti

Anoche estuve haciendo limpieza y me encontré con unos artículos que Hugo 'El Loco' Gatti escribió en el diario AS. Ya sabemos todos que el individuo éste es un impresentable. Antes de su promesa de pegarse un tiro ya era famosa su frase "ese gordito no le puede hacer un gol a nadie" en referencia a Maradona antes de un partido. En ese partido el Pelusa le metió cuatro.

No quisiera que caigan en el olvido sus artículos. Son de la temporada del doblete del Valencia. Pasen y disfruten. Ah, todavía estoy esperando que se pegue un tiro.

LA LIGA YA ES DEL MADRID

4.3.2004

La Liga ya se ha ganado, yo lo tengo muy claro. Cuando empezó el campeonato ya dije que era para el Madrid y no me estoy equivocando. Hoy lo reafirmo. ¿Por qué? Pues porque el Madrid es el mejor equipo de España y del mundo. Además, el Valencia y el Deportivo se enfrentan pronto entre sí. Incluso me atrevo a arriesgarme asegurando que el segundo puede ser el Barcelona, porque ha remontado en las últimas fechas, porque han ganado mucha confianza y porque, tras el Madrid, es el equipo con apellido más ilustre de su país.

Ante el Racing, los galácticos pueden permitirse el lujo de descansar para que jueguen los Pavones. Aquí en Argentina no hay dudas: el Madrid será el campeón. Y sus rivales también lo saben: el Valencia ha dejado escapar el tren de su papá (siempre digo que el Madrid tiene dos hijos bobos, el Barça y el Valencia). Los de Queiroz también alzarán el trofeo de la Copa, estoy seguro. Yo lo digo ahora: si el Madrid deja escapar esta Liga yo me pego un tiro en medio del Bernabéu (dos en caso de que perdiera también la Copa del Rey). El drama mayor viene en la Champions League. No lo veo tan claro, así que no me arriesgo a jugarme la vida en ello. Me da mucho miedo esa competición. Hablamos de cosas mucho mayores y el Bayern irá a morder al Bernabéu.


EL VALENCIA TIENE MIEDO

1.5.2004

No sé de qué se quejan. Figo lo dijo ayer bien claro y en las imágenes de televisión se aprecia perfectamente: no tocó a Puyol, lo que significa que la tarjeta amarilla era injusta. Es cierto que no me gusta que se rearbitren los partidos, porque el fútbol es un juego vivo al que se priva de todo encanto con estas acciones. Pero entiendo por qué lloran. Nadie defendió a Roberto Carlos cuando le sancionó la UEFA. ¿O me equivoco? Cualquier club que hubiera recurrido esta tarjeta tendría el mismo resultado. No fue falta. El árbitro no se dio cuenta en ese momento y expulsó a Figo. Pero se ha demostrado su inocencia y el resultado es que el portugués jugará esta noche junto al resto de los caciques en Riazor. Buena noticia.

Lo que ocurre es que todo el mundo tiene envidia al Madrid. La sufre el Valencia, que no deja de protestar cualquier incidente que no le conviene. Y también es envidioso el resto del mundo. Acá, en Argentina, se acusa al Real Madrid de recibir favores. Es como si todos quisieran tener a los galácticos en sus equipos pero, como eso es imposible, se deciden a atacarlos. Al Valencia ya le agarra el chucho y por eso siente miedo. El Real Madrid les muerde. Temen a los caciques y, en este caso, a Figo en especial. Él es el que se encuentra en mejor forma, el que puede decantar el partido de hoy en una victoria vital para los suyos, el que se dejará la piel de nuevo en la cancha. Dejen de temer. La Liga será blanca.


MANERAS DE GANAR

3.5.2004

La sensación que me dio el partido de ayer fue que el Valencia es un equipo que lucha por la permanencia mientras que el Betis parece un recién ascendido. Los de Benítez juegan igual que Boca: todos defendiendo a muerte y buscando una contra con la poca calidad que hay arriba, y aún menos si no juega Aimar. Da igual que el argentino esté lesionado o no: ese técnico no le quiere ver ni en pintura, no cabe en su corsé táctico. El Valencia se sujeta en Ayala, Baraja y Mista, pero en el momento en el que se le escape alguno de ellos no pasará de pelear por una plaza en la Copa de la UEFA. Supuestamente tiene la Liga en el bolsillo, pero que no se confíe: aún quedan tres jornadas y todavía puede pasarlo muy mal si se ve campeonando.

Me sorprendió ver el insulso juego de los valencianistas. En un partido en el que podían dejar casi sentenciado el título, aburrieron. Ganaron, sí, pero durmieron hasta a su público, que ni siquiera animaba a causa del tostón. Y es que hay maneras y maneras de ser campeón: una es mediante el fútbol, que no es la bandera del Valencia precisamente, y la otra es jugando a no perder, en lo que los valencianistas sí que son maestros, como Boca o como la Juve de los últimos años. Está claro que todos los títulos cuentan y que si gana la Liga habrá que felicitarles, por supuesto, pero si yo fuera uno de sus aficionados pediría algo más que números para gozar.


BENÍTEZ Y SU INSTRUMENTO

10.5.2004

Antes que nada, el Valencia no salió campeón, sino que la Liga la perdió el Madrid. Lo que pasa es que los blancos han entrado en un pozo depresivo que ha afectado a táctica, lucidez mental, estado físico y relación con la Diosa Fortuna. El Valencia es tácticamente el mejor equipo de España y el que más se parece a un conjunto argentino, sobre todo a Boca: como no sabe ganar dominando, vive del contragolpe. Eso se nota sobre todo en que ganó la mayoría de puntos de visitante, donde no está obligado a llevar el peso del partido. Ayala, Cañizares, Baraja, Vicente y Mista son la columna vertebral del equipo y en esa táctica mezquina de Benítez ellos son los que sacan los puntos adelante día tras día.

El mérito va a quedar para el entrenador del Valencia, porque este equipo que él hace, en el que incluso se permite el lujo de prescindir de Aimar, es su instrumento. En cualquier caso, Benítez está cavando su propia fosa: con el juego que impone en el Valencia jamás se le abrirán las puertas para entrenar a un Real Madrid o un Barcelona. El fútbol es de vivos, no es para avivar a los rivales. El Madrid avivó al Valencia y le birlaron la Liga. Eso sí, no quiero acabar esta columna sin felicitar a los campeones, porque quien gana una Liga se lo merece, y sin avisar a mi tapicero: necesito unas fundas nuevas para los cojines porque las de ahora las he gastado durmiéndome en los partidos del Valencia.

Foto: www.as.com