sábado, 21 de abril de 2007

El clásico contra el Madrid en el Bernabéu



Hoy es uno de esos días marcados en el calendario. Hoy, esta noche, jugamos contra el Real Madrid. Estos son los partidos que nos gustan a todos, incluso a los que no les gusta el fútbol. Todos tenemos amigos que el fútbol les importa menos que un pepino que sin embargo esta noche nos preguntarán cómo ha quedado el Valencia. A lo mejor, incluso, se vienen al bar a verlo con nosotros. Es un partido que nos altera, nos excita, nos pone nerviosos, nos hace sentir emociones, nos hace sentirnos vivos.


Jugamos en Madrid, en el Santiago Bernabéu. El Valencia lo ha visitado 71 ocasiones en liga, con un impresionante balance de 54 derrotas, 9 empates y solo 8 victorias. Es decir, unas estadísticas realmente horribles.

Siempre hay algo en juego en los duelos contra el Madrid, aunque sea simplemente el orgullo. Pero esta noche hay mucho en juego. No la liga, como ha ocurrido en otras ocasiones, porque no creo que ni el Madrid ni el Valencia alcancen al Barça, pero sí la posibilidad de soñar con la liga.

El que gane de los dos luchará, quizá, por ese sueño de ganar la liga (si el Barça la fastidia, claro). El que pierda luchará por el cuarto puesto, el último puesto Champions. Y si empatan, pues dirán los dos adiós a la liga, y seguirán peleando por el segundo, tercer o cuarto puesto.

Esperemos que el árbitro no estropee el partido. Esperemos que Quique tampoco lo estropee.

2 comentarios:

www.checheche.net dijo...

Pero esta noche hay mucho en juego. No la liga, como ha ocurrido en otras ocasiones, porque no creo que ni el Madrid ni el Valencia alcancen al Barça, pero sí la posibilidad de soñar con la liga.

Pues si que vamos mal cuando tenemos que luchar por la posibilidad de soñar... Mejor no dormir y hacer bien los deberes para el curso que viene.

Little

abraxas dijo...

@ Little

Ya lo creo que hay que hacer bien los deberes para la próxima temporada, pero antes tendremos que finalizar ésta lo mejor posible.

Porque, aunque no queramos pensar en ello, la temporada puede acabar en desastre absoluto. Tan solo con quedar quintos...