Objetivo mínimo cumplido, que no satisface a la afición

La jornada 36 ha concluido, y las cosas se van clarificando. Con su derrota, el Valencia se despide del sueño de la liga, pero logra matemáticamente la cuarta plaza gracias a la derrota del Zaragoza en Sevilla. Así pues, la liga es cosa de tres: Madrid, Barça y Sevilla. Mi opinión es que el Madrid tiene el título bien encarrilado.

Pero en lo que respecta al Valencia, la situación del entrenador Quique Sánchez Flores se ha complicado. De todos es sabida la guerra soterrada (a veces no tanto) entre Quique y el director deportivo Amedeo Carboni. La afición ha tomado claramente partido por Carboni, pero el entrenador cuenta con grandes amigos y valedores entre los periodistas. Hoy, por ejemplo, escribía Joan Carles Martí en LEVANTE-EMV:

Pañuelos de reflexión

El fútbol pone a cada uno en su sitio. Cierto que si Jorge López primero, y Angulo después, no hubieran errado dos goles claros para desempatar, la semana que le espera al Valencia sería otra. Pero, el Villarreal se llevó los tres puntos con autoridad y el Valencia perdió todas las aspiraciones al título. Por si eso no fuera suficiente castigo, el club caerá de nuevo en unos vaivenes organizativos que hablan muy poco a su favor. La grada señaló a Quique, pero el técnico es una de las partes, que junto con Juan Soler y Amedeo Carboni, forman la cúpula dirigente.

El problema es que hace meses que el presidente permite que Quique y Carboni no se hablen, y no sólo no hace nada, sino que además alienta que cada uno haga la guerra por su cuenta. Pues ahí esta el resultado. Ahora todos las luces enfocan al técnico, pero mal acaba, lo que mal empieza.

Soler tiene un problema, pero si tarda tanto en arreglarlo como parece, el equipo en vez de tranquilidad para asegurarse la plaza de Liga de Campeones, el objetivo declarado del club, puede ir a peor. Qué nadie olvide que todavía quedan dos partidos por disputar.

Por contra, un club como el Villarreal, con una gestión familiar, como la que pretende Soler para Mestalla, salió reforzado para sus aspiraciones europeas.

Este Valencia tiene un grupo magnífico. Jugadores determinantes, que contagian al resto. Un banquillo con un cuerpo técnico capaz de gestionar con acierto las crisis de un club abonado a una patología endogámica. Pero ayer no tuvo suerte, perdonó lo que no está escrito y al final se enredó en su propia red.

Este es el tipo de artículos que irritan a la afición. Joan Carles Martí, del que desconozco su relación personal con Quique pero que presupongo muy buena, se encarga de precisar:

1. Que el Valencia perdió por errores de Jorge López primero, y Angulo después. La culpa de la derrota no es pues del entrenador, es de los jugadores.
2. Que la grada señala a Quique como culpable, pero que el técnico forma parte de la cúpula dirigente con Juan Soler y Amedeo Carboni. Así que los pañuelos y los gritos debían ser para todos ellos. Todos a la calle pues.
3. Que si hay algún culpable máximo de la situación del Valencia, ese es el presidente Soler que permite que Quique y Carboni no se hablen sin hacer nada al respecto.
4. Que si el Valencia no se asegura la plaza de Champions, la culpa es de Soler por no arreglar el problema entre Quique y Carboni, no sería por perder los dos partidos que quedan (afortunadamente la derrota del Zaragoza nos ha solucionado este posible problema).
5. Que el Valencia debería aprender del Villarreal, que ese sí que es un equipo bien gestionado.
6. Que el Valencia cuenta con un cuerpo técnico capaz de gestionar con acierto las crisis, pero que ayer no tuvo suerte. La culpa de las derrotas nunca es del entrenador. Si no es de los jugadores, que son magníficos y determinantes, entonces es de la mala suerte.

Joder, con amigos como Joan Carles Martí, Quique no necesita abuela.

La afición está hasta los mismísimos de este tipo de artículos, de este tipo de periodistas capaz de alabar hasta el infinito y más allá la labor de Quique, y de justificar sus derrotas de tal forma que él nunca es el responsable. La suerte, los fallos de los jugadores, la poca implicación de los suplentes, los árbitros y Carboni son las excusas más utilizadas.

Pero la afición está harta. La afición es soberana y no entiende de confrontaciones internas, de filtraciones a periodistas, de oscuros intereses periodísticos, y de demás zarandajas. La afición quiere títulos, y sabe perfectamente que no son fáciles de conseguir, que no se pueden conseguir todos los años, pero la afición quiere que por lo menos se luche por ellos, y no por la cuarta plaza de la liga, que ahora nos están vendiendo como un gran logro. Sin ir más lejos, David Albelda acusa a la afición de tener mala memoria y "no recordar que estuvimos a 12 puntos de la Champions". Che, si es que somos unos desagradecidos.

Quiero dejar constancia aquí de la indignación de la afición contra determinados periodistas. Leed el extracto de un escrito de Desmemoriats, un forero de Sentiment Che. Leed el artículo completo, que no tiene desperdicio.

Señores periodistas… !!! QUE OS DEN !!!

Cuando un estadio como Mestalla, y una afición como la del Valencia CF, le canta a un entrenador que se vaya, no lo hace gratuitamente, por fruto del azar, o por simple capricho, es cuestión de HARTAZGO, simplemente estamos hasta las narices de escuchar excusar burdas, baratas y hasta incluso denigrantes, estamos hartos de “objetivos mínimos” y de mesuras miserables, estamos hasta el gorro de ver actitudes y aptitudes que rozan la vergüenza ajena, estamos rabiosos de ver como se ha escapado una liga que “era nuestra” (podría haber sido, mejor dicho) a poco que se hubieran buscado alternativas y soluciones, en vez de perder el tiempo en buscar excusas al nulo rendimiento o estrambótico planteamiento realizado sobre muchos partidos.

Pero volviendo al tema, el de la pronunciación de Mestalla… lejos de hacer pensar y reflexionar a muchos de ustedes, incluyendo al implicado, se pasan las horas intentando “desacreditar” la soberana palabra de la afición, la que dictó el parlamento deportivo del valencianismo (Mestalla), intentando vendernos como bobos que no sabemos ni de fútbol ni lo que queremos.

Esta situación nos tiene hasta el mismismo… Estamos hartos, de ustedes, de Quique, de sus amigos, de sus campañas mediáticas intentando vender lo que no quiere comprar nadie y de sus maquillajes de la realidad. Estamos hartos de ver el nulo rendimiento de un equipo de 25 mil millones de pesetas en presupuesto, estamos hartos de que aquí se lesione la gente como moscas en un campo de exterminio y nadie abrá la boca, estamos hartos de la mala preparación física, estamos hartos de que solo se cuenten con 13 jugadores en toda una temporada, estamos hartos de que se tire por lo bajo a este proyecto… ¿con que intención? Muy simple, si apuntas bajo, y haces mas… acabaras siendo un héroe, ahora si apuntas a lo que dice la lógica y haces menos, mucho menos, acabas a palos.

No tengo nada que añadir a las palabras de Desmemoriats. Tiene más razón que un santo. Que Juan Soler vaya tomando en cuenta su opinión y la de otros muchos aficionados que coinciden plenamente con él.

Foto: www.dailymail.co.uk